El pueblo de Saint-Symphorien, en la región francesa de las Landas, podría ser como cualquier otro de su entorno si no fuera porque allí pasó los veranos de su infancia el escritor François Mauriac, Premio Nobel de Literatura en 1952.
Su familia era propietaria de un chalet del estilo arquitectónico típico de la bahía de Arcachon que hoy es propiedad de la región Nouvelle-Aquitaine y gestiona ACLA, la agencia de la región que promueve la cultura literaria, cinematográfica y audiovisual, que también se encarga de la programación y la puesta en marcha de las residencias artísticas que se llevan a cabo en el Chalet Mauriac. Ilustradores, escritores, dramaturgos, músicos… encuentran allí un espacio propicio a la creación. En cuanto a los traductores, cada año se otorgan dos solicitadísimas becas para traductores del francés. Continue reading